Conmemoración de las víctimas de la Gran Redada
El 30 de julio de 1749, se produjo uno de los hechos históricos más lamentables de la historia de España, el intento de exterminio de los gitanos y las gitanas españoles/as, conocido como la Gran Redada.
Para los gobernantes, todos los gitanos eran sospechosos de desobedecer las leyes y, aunque las familias gitanas cumplieran las normas que se les había impuesto de tener una residencia fija y un trabajo común, se preparó una gran redada para apresar a todos los gitanos y separarlos de la sociedad.
Entre 9.000 y 12.000 mujeres, hombres, ancianos y niños fueron apresados. Se embargó y subastó sus bienes para pagar los gastos de su traslado a prisión. Hombres, ancianos, jóvenes y niños fueron llevados a presidios, minas y obras públicas. Las mujeres y los niños menores de siete años a depósitos o fábricas donde trabajarían.
Para privarles de la libertad no hubo más delito que el ser “meramente gitanos”.